En la actualidad todo se mueve a través de internet o de las redes sociales. Ante las ganas de asistir a un evento masivo o a un show y, con la escasez de tiempo con la que cuentan generalmente los argentinos, buscar entradas en internet es una de las metodologías más utilizadas y, en su mayoría, terminan adquiriéndose por ese medio.
Ejemplo de este tipo de negocios que ofrece entradas online a un sinfín eventos, es Entrada Fan. Se autodenomina como “una empresa joven y con mucha proyección de crecimiento”, en la que desarrollan “la manera que esperabas para comprar y vender entradas, súper segura, rápida y fácil de usar”, y aseguran ser “una comunidad de más de 100.000 usuarios”, “directos y claros” en su forma de trabajar.
Autocatalogada como la primera plataforma argentina dedicada a la intermediación de intercambios de entradas, fundada en el año 2013, es uno de los primeros sitios web que aparecen al googlear para la compra de tickets. En la red aparecen cada vez más sitios no oficiales de reventa que se aprovechan de la ilusión de los fanáticos y del vacío legal que aún no se soluciona.
Entrada Fan fue y sigue siendo denunciado constantemente desde que opera, recibiendo reclamos a través de distintas páginas de Defensa al Consumidor y en las redes sociales. En la web “TuQuejaSuma”, organización que brinda el espacio para que los usuarios damnificados hagan públicos sus problemas al adquirir un producto o servicio para buscar solucionarlos, se pueden encontrar comentarios como:
“Tanto yo como una amiga pusimos a la venta entrada en Entrada Fan para show de Ricky Martín 2020. Se vendieron las entradas, todo perfecto. El problema es que Entrada Fan no pagó. Ya pasaron meses y no responden email, ni Whatsapp, nada ¡Queremos que depositen lo que corresponde ya!”.
“Compre 2 entradas para el show de Soda Stereo el 21 de marzo y me mandaron 2 para el 22 de marzo. Pague $8825,70 por las 2 entradas y me dieron 2 entradas por $2200. Por este hecho. Entradafan no se hace responsable”.
Son muchos los reclamos que se hacen día tras día y muy pocos reciben respuesta. La empresa no se comunica con estos usuarios y la mayoría de ellos ya no sabe cómo manejarse ante estas situaciones. Silvina Casella, una de las afectadas, explicó que luego de recibir tantas evasivas sobre el envío de sus entradas, dos cosas le llamaron la atención: “en ningún lugar de la página había un teléfono de contacto y la dirección de correo que allí publicaban era incorrecta, no existía”. Cuenta que diez días antes del recital los tickets todavía no le llegaban, por lo que empezó a buscar opiniones en Google sobre la empresa y ahí fue cuando se dio cuenta que había alguna irregularidad.
Un grupo en FaceBook llamado “NO COMPRAR ENTRADAFAN” resultó ser el mayor proveedor de pruebas y datos para la investigación. A raíz de los testimonios de los usuarios, integrantes del grupo, se detectó que el accionar de Entrada Fan era similar en la gran mayoría de los casos. Dice ser un sitio confiable, que las entradas son reales, que el envío es gratis, y que el valor por el que venden la entrada es el monto original. Una vez que se realiza la compra, no vuelven a comunicarse con la persona ni a responder sus mails o mensajes.
“Tantos fueron los mensajes por WhatsApp y mails que logré que 12 horas antes del recital la empresa deje en un locker de PackAsap el ticket, y tuve que ocuparme de ir a retirarlo. Al momento de presentarlo en la entrada del show, como temía, correspondía a una entrada de 0$ (cortesía) en una ubicación muy alejada del escenario cuando la mía correspondía a FILA UNO y había costado 12 mil pesos”, comentó Silvina.
Problemas en el tiempo de envío, precios descabezados en la web y mucho más altos que los que realmente figuran en la entrada original, cancelación de la compra a último momento sin devolver el dinero al comprador, tickets con shows de otras fechas a las solicitadas o con una ubicación distinta a la prometida. Todas estas estafas pudieron ser corroboradas por material probatorio. No sólo quienes compran entradas son estafados, sino también aquellos que entregan las suyas para ser vendidas y recibir el dinero a cambio. Se realiza la transacción entre el comprador y el sitio web, pero no siempre vuelve a ellos la parte del pago que les corresponde.
Según los datos recabados, las entrevistas a consumidores y notas periodísticas encontradas acerca del tema, se pudo comprobar que Entrada Fan no siempre cumple con lo pactado. Las fuentes testimoniales, en su mayoría, aseguran que las entradas que recibieron (de haberlas recibido) no eran las mismas por las que habían pagado.
El problema central para estas personas es que no se hace nada al respecto y la empresa sigue funcionando. Patricia Gammino, abogada, informó que de realizarse una denuncia formal, se tendría que efectuar invocando al Art. 172 del Código Penal que dice:
"Será reprimido con prisión de un mes a seis años, el que defraudare a otro con nombre supuesto, calidad simulada, falsos títulos, influencia mentida, abuso de confianza o aparentando bienes, crédito, comisión, empresa o negociación o valiéndose de cualquier otro ardid o engaño".
Luego de la denuncia, de realizarse una sentencia, se le debería prohibir a la empresa la actividad comercial del tipo que viene realizando. Sin embargo, muchos no se atreven a realizar denunciar formales ya que el costo de un abogado terminaría siendo aún más caro que el valor de la entrada que pagaron.
La realidad es que no existe aún una legislación específica que trate el tema de fraude o estafas en internet. No hay una ley que regule puntualmente este tipo de negocio ni un artículo que determine algún tipo de sanción para las estafas en internet. El objetivo de las denuncias de las personas estafadas es, aparte de recuperar lo perdido, que esto se haga público: “deberían cerrarlos y enjuiciarlos por estafa", pide Marcela Cáceres, creadora del grupo de FaceBook “NO COMPRES ENTRADAFAN”.
Para que esto se haga más visible, según el contador Miguel Ángel Casella, es necesario que se realicen más denuncias formales. Entrada Fan opera gracias a un grupo inversor llamado “Vantage Tech Ventures LLC”, con sede en Nueva York. La operación en América Latina está a cargo de Ticketing SA, conformado por el grupo empresario de Entrada Fan (es su nombre de fantasía). Los reclamos que se hagan a esta empresa, no llegan a ser informados al grupo inversor, ellos no se responsabilizan por su accionar en Argentina, debería hacerlo Ticketing SA. Estos datos son importantes a la hora de realizar las denuncias, en su sitio web se encuentran identificados como “Vantage Tech”, cuando en realidad operan como Ticketing SA.
“Es fundamental que las personas reclamen, que denuncien y hagan oír su voz. Con un número de denuncias realmente importante y pruebas reales, tanto la policía como la fiscalía deberían intervenir”, informó Miguel Casella.
La recomendación es tener cuidado en las páginas en las que se decide comprar. Hay muchas páginas certificadas, con sellos de calidad y buenos comentarios que dan mayor seguridad. Existen una serie de trucos para que los consumidores eviten caer en estafas por internet, útiles al momento de realizar cualquier tipo de compra.